¿Qué son los contracargos?
Un contracargo, es una devolución, anulación o reversión de un cargo realizado con tarjeta, que el cliente puede solicitar. Y tras una dura batalla que dé lugar a la resolución del conflicto, si la entidad financiera responsable de la operación estima legítima la reclamación, el vendedor deberá reembolsar el dinero al comprador. En caso contrario, no se producirá ninguna acción y el cargo se procesará con normalidad.
Por ello, tanto si eres comprador como si eres vendedor, es esencial conocer en qué consiste y cómo funciona un contracargo. Saber cómo solicitarlos o como evitarlos y disputarlos, en función de nuestra posición.
¿Qué es un contracargo?
Se trata de un proceso que siempre involucrará tres partes; el cliente, que será quien inicie la disputa, el vendedor, que será el afectado por dicha disputa, y el banco emisor de la tarjeta de pago, que será el encargado de resolverla.
De modo que, cuando un comprador no reconozca un cargo en su extracto, reciba un producto en mal estado, o haya sido víctima de un robo de tarjeta, por ejemplo, este comunicará al banco emisor la solicitud del contracargo.
A su vez, presentado ya el reclamo, el banco deberá iniciar los procedimientos con el vendedor, comunicando la naturaleza de la incidencia, y dándole la oportunidad de responder dentro de un plazo con las pruebas necesarias para desestimar la disputa.
Pasado este plazo, el banco deberá decidir la disputa a favor del cliente o del comerciante, reembolsando o no la cantidad discutida.
¿Cómo comprador, cuándo y cómo puedo solicitarlo?
Podremos solicitar un contracargo con prácticamente todos los gastos pagados con tarjeta, ya sean compras hechas por internet, como presenciales.
Los casos más comunes son por robo de tarjeta, productos defectuosos o no entregados o errores en el proceso de compra o de pago.
Para realizar esta gestión, deberemos ponernos en contacto con la entidad financiera responsable de la tarjeta con la que hemos realizado el pago en cuestión, o en casos de compras online, frecuentemente dispondremos de una opción de reclamación en la misma plataforma.
Una vez realizada la solicitud a la entidad correspondiente, con las pruebas justificativas que ésta considere oportunas pedirnos, la entidad se pondrá en contacto con la parte vendedora, reteniendo el cargo hasta que se resuelva la disputa.
Finalmente, con las pruebas de las dos partes, la entidad emisora de la tarjeta deberá determinar qué parte tiene razón, y procedes acorde con el cargo retenido.
¿Y si soy el vendedor?
Para tratar de evitar estas situaciones, podremos tomar algunas medidas preventivas, como una correcta documentación de cada transacción, cumplir con las normas de procesamiento y de protección de las tarjetas de pago, y usar datos claros e identificativos en los cargos.
Si aun así recibimos un contracargo, deberemos facilitar a la entidad financiera todos los documentos o pruebas que respalden la validez de la operación. Si las pruebas facilitadas son suficientes para demostrar la legitimidad del cargo, el importe de la operación será liberado y cobrado por el vendedor.
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Ana del team FinOra24